otra Masacre escolar (Ahora en Uvalde) empaña de dolor a la nación
“¿Hasta cuándo el país más “seguro” del mundo aceptará esta nueva realidad? ”
Una nueva tragedia ocupa los titulares del país. En la localidad de Uvalde en Texas, 19 estudiantes de la escuela primaria robb, en su mayoría hispanos y dos maestras fueron asesinados por un atacante que también murió en la escena.
en este artículo exploramos las causas del problema: ¿es un asunto de salud mental o de fácil acceso a las armas?
Las caras inocentes de la violencia armada: un saldo de 19 estudiantes y dos maestros dejó la más reciente masacre escolar en una pequeña ciudad de Texas.
Este es el segundo tiroteo más mortífero que involucra niños en una escuela primaria desde el ocurrido en Sandy Hook en Newtown, Connecticut en el 2012.
De nuevo las autoridades ofrecerán su pésame y oraciones, pero no se vislumbra ninguna solución inmediata. Existen dos vertientes del problema, unos responsabilizan a los problemas de salud mental como causa de los tiroteos masivos, otros se inclinan en pensar que la solución viene en hacer leyes más eficaces sobre la tenencia de armas. En JEVAS COMBATIVAS hicimos un análisis.
Uvalde es una ciudad ubicada en el Condado de Uvalde con una población de 16,122 habitantes, según cifras del Censo del 2020.
¿Cuál es el detonante de los tiroteos masivos en EE.UU.?
De acuerdo con Renée Binder, ex-presidenta de la American Psychiatric Association:
“Aunque nos hiciéramos cargo de todos los que sufren algún tipo de trastorno mental y los encerráramos y los medicáramos, apenas comenzaríamos a indagar en el problema de la violencia”.
El reciente tiroteo que perpetró un supremacista blanco en Buffalo, Nueva York, dejó un saldo de 10 personas asesinadas y tres heridas. El arma utilizda fue una AR-15. De las 13 personas atacadas 11 eran afroamericanas. El tiroteo está siendo investigado como un “crimen de odio” y un “caso de extremismo violento por motivos raciales”, manifestó Stephen Belongia, agente especial de la oficina del FBI en Buffalo.
El presidente, Joe Biden, declaró en una visita al lugar de la matanza que el “supremacismo blanco es un veneno en el cuerpo político estadounidense”. Biden lo catalogó como “terrorismo nacional”.
Hasta el 24 de mayo de 2022 se han perpetrado 213 tiroteos masivos en el país, según datos de Gun Violence Archive. Existen dos vertientes en torno a la violencia armada en EE.UU., unos aseguran que se debe al fácil acceso a las armas y que se necesitan leyes más contundentes, mientras que otro grupo afirma que las personas con problemas mentales son un peligro latente y los responsables de esta violencia.
En entrevista con National Public Radio, NPR, el profesor de psiquiatría de la Universidad de Duke, Jeffrey Swanson, quien ha estudiado los patrones de violencia en las principales ciudades de los Estados Unidos asegura que la mayoría de las personas con problemas de salud mental no son violentas.
“Probablemente hay más de 40 millones de personas en los Estados Unidos que cumplirían los criterios para una condición de salud mental diagnosticable, 10 millones con un trastorno grave como esquizofrenia o trastorno bipolar o depresión mayor y la gran mayoría no son violentos con otras personas, y nunca lo serán”, acotó Swanson.
La maestra de educación especial Eva Mireles de 44 años fue una de las víctimas fatales del tiroteo escolar en Uvalde, Texas.
¿Amenazas no escuchadas?
Según informes de prensa el asesino de Buffalo realizó comentarios amenazantes que atrajeron a la policía a su escuela secundaria en la primavera de 2021, pero no fue acusado de ningún delito y no tuvo más contacto con las fuerzas del orden después de su salida del hospital. Esto deja entrever la falta de comunicación entre el sistema de salud mental y la policía. ¿Se le podría haber conseguido ayuda o cerciorarse de que no tuviera acceso a armas de fuego?
Según Kaiser Health News, KHN, uno de los tres principales programas operativos de KFF (Kaiser Family Foundation), una organización sin fines de lucro que brinda información sobre temas de salud a nivel nacional, varios autores de masacres en EE. UU., recibieron tratamiento, pero eso no impidió sus matanzas. Citaremos dos ejemplos.
.- El asesino de Aurora, Colorado, que 2012 mató a 12 personas en un cine recibió tratamiento psiquiátrico e incluso habló sobre pensamientos homicidas durante su terapia, pero no fue reportado a las autoridades porque no develó ningún plan concreto.
.- El asesino de la Universidad Virginia Tech, que mató a 32 personas e hirió a 17 en 2007, fue diagnosticado con un trastorno del estado de ánimo después de amenazar con autolesionarse en 2005. Posteriormente fue hospitalizado durante una noche y un juez ordenó que recibiera tratamiento ambulatorio, pero no fue evaluado ni tratado y existen otros casos similares en donde las acciones erráticas de probables asesinos no encendieron las alarmas del sistema de salud mental, ni de las autoridades.
El senador por Nueva York, Charles Schumer declaró que habría que prohibir la circulación de armas de guerra en las calles.
“Debemos abordar el flagelo de la violencia armada y, en última instancia, prohibir las armas de guerra en nuestras calles”.
Razones multifactoriales
JEVAS COMBATIVAS consultó con la psicóloga Neira Linares quien opina que uno de los problemas en relación con los tiroteos masivos es la violencia generalizada y los padres emocionalmente ausentes.
“La violencia se expande y está de moda. Observamos a menores de edad adictos a los videojuegos de matanzas, de agresiones, de estrategias de guerra. En pleno proceso de transición de la niñez a la adolescencia, se leen noticias de esos menores que se graban haciendo acoso escolar, maltratando a otros menores, y peor aún, portando armas y actuando como perpetradores en tiroteos dentro de las instituciones escolares”.
“Son niños que desde pequeños se educan con juegos violentos en los dispositivos que sus padres adultos 100% responsables les facilitan por estar muy ocupados, es decir, emocionalmente ausentes”, agregó Linares.
La psicóloga dice que las razones para la violencia son multifactoriales, pero una de las principales es educativa.
“La educación se inicia en el hogar, se fortalece en la escuela y se solidifica en la sociedad; y en estos tres niveles, se ven adultos que en su rol de padres se muestran rígidos y muy ocupados o laxos e inmaduros emocionalmente para criar a sus hijos en valores. Los menores de edad se aíslan frente a esos videojuegos agresivos, y luego drenan ese abandono de sus padres con violencia intrafamiliar, o internamente en autoagresión, o externamente en acoso, y/o matando a otras personas. Se puede observar que en cada uno de los protagonista de un tiroteo hay un menor herido emocionalmente, reflejando su abandono familiar y agrediendo a sus iguales”, explicó.
Nota: En JEVAS COMBATIVAS no mencionamos los nombres de los asesinos autores de los tiroteos masivos.
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